Darle un sentido a la vida y vivir apasionadamente puede hacer que nuestra experiencia en este mundo sea algo extraordinario, sin embargo, podemos perdérnoslo cuando nos limitamos simplemente con nuestros pensamientos y con el miedo a vivir.
Lo que hacen estos
pensamientos o quizá mejor dicho hábitos mentales, es bloquearnos la mente, nos
impiden ver la realidad, la verdad y no nos dejar vivir plenamente.
Aquí te dejo estos clásicos pensamientos que te pueden arruinar vivir la vida con pasión… Chécalos, si descubres que te has encontrado diversas ocasiones pensando así, entonces sabrás lo que tienes que cambiar para dejar de sabotear tu vida y lograr el éxito que deseas“La vida es una serie de cambios naturales y espontáneos, resistirse a ellos solo crea dolor. Deja que la realidad sea realidad. Deja que las cosas fluyan naturalmente hacia adelante en la forma que les gusta” Lao Tsé
1.- Resistencia a la realidad.
La vida no es
fácil, pero resistirse a los sucesos complicará más tu existencia.
Las personas temen
al dolor…. Quiero contarte que yo he descubierto que el dolor te permite
experimentar diversos placeres, el dolor te permite vivir plenamente. ¿Has de
pensar que estoy loca verdad?
Déjame te explico…
Si no corremos el riesgo de sentir dolor, entonces tendríamos que prescindir de
valiosas cosas que te ofrece la vida como
tener hijos, el amor, el éxtasis del sexo, la amistad… y todo lo que
hace la vida significativa e importante… ¿Lo habías visto así? ¿Sigues creyendo
que estoy loca?
Con el dolor, una
persona puede crecer en cualquier dimensión, la vida está llena de dolor.
Tienes que aceptarlo para poder vivir plenamente o no vivir en absoluto.
Cuando te resistes
a las emociones y me refiero a todas, dolor, amor, pasión, te resistes a vivir.
Cuanto más te
resistas a vivir, más sufrirás.
2.- Soy un impostor, un fraude.
¿Te preocupa no
saber lo suficiente? ¿No contar con la preparación adecuada? ¿No ser lo
suficiente? Esto puede ser beneficioso si no te quedas bloqueado por ahí y te
aplicas a aprender lo necesario.
Pero si permites
que te detenga y dejas de vivir, de experimentar, incluso de sentir, porque
simplemente crees que no lo mereces, estas acabado mi amigo.
¿Quién dice que no
mereces vivir plenamente? Tú mereces todo, solo tienes que animarte a tomarlo.
3.- El clásico “Pero es que…”
Los pensamientos
de:
Pero es que yo no
puedo…
Pero es que yo no
soy lo suficientemente bueno…
Pero es que yo no
sé…
Pero es que no
tengo conexiones…
Pero a quien le
interesa lo que haga…
Pero quien querría
escucharme…
Pero y si pierdo
dinero…
Pero y si pierdo el
tiempo…
Pero es que no sé
por dónde empezar…
Pero es que nada…
¡Basta! Solo son excusas, pretextos, evasivas, pensamientos que limitan…
Uno debe de aceptar
el hecho de que si quiere seguir adelante, tiene que hacerlo a pesar de sus
excusas revoloteando en su cabeza. Siempre hay riesgos, pero eso es lo que hace
que la vida se ponga interesante.
4.- Pensar que todo lo que hagas, debe quedar perfecto.
Yo en lo particular
estuve obsesionada con el perfeccionismo
por mucho tiempo. Siempre queriendo hacerlo todo perfecto, hacer lo “correcto”,
de tal forma que nadie pueda criticar o juzgarme. Era como mi forma de
protegerme a mí misma contra el mundo. Que gran mentira.
Hasta que un día, me
di cuenta que es mejor ser prácticos, pues uno puede perder mucho el tiempo
buscando la supuesta perfección en todas las cosas que haces y nunca quedará perfecto.
La mayor parte del tiempo lo más simple es lo que mejor funciona.
Hoy en día veo que
la perfección es un gran ideal, pero no es un objetivo alcanzable. Siempre es
bueno buscar crecer y mejorar. Pero uno jamás será perfecto, y eso, mis
estimados amigos, es la belleza de la vida.
Recuerden: no se
trata de perfección, sino de progreso constante.
5.- Preocuparte por lo que pensará la gente.
Te voy a decir una
cosa… Las personas no se preocupan realmente por lo que haces (exceptuando un
familiar que se preocupe por ti). Pero todos tienen sus propias vidas y están
ocupados en ellas.
Y quien nada más está
viendo a quien juzgar y criticar, que si lo hace bien, que si lo hace mal, que
si no sabe, ¡compadécelo!, porque seguramente no tiene vida propia o su vida no
le complace o se creen superiores y que
cuenta con toda la experiencia del mundo para sentirse con el derecho de
decirle a los demás lo que tienen que hacer,
¡tienes que compadecerlos!, porque son personas pierde amigos y
lastima-gente. Que no son capaces de entender que la vida de todos es diferente.
Que las experiencias son diferentes y lo que para ellos funciono para otros no.
Ni te molestes en tratar de corregirlos,
caerías en el mismo juego que ellos y se sentirían ofendidos. Además tarde o
temprano lo entenderán y si no, déjalos, se trata de su vida, no de la tuya, no
te lo tomes personal, solo compadécelos.
Por eso no dejes
que nadie más te impida seguir con tu pasión, hacer lo que te gusta o vivir con
lo que te hace feliz. Decídete a vivir la vida que estas destinado a vivir.
Que la gente diga
lo que quiera, pero tu siente pleno simplemente haciendo lo que amas, y
viviendo cada momento siendo tu y no lo que los demás esperan que seas.
6.- Compararte con otros
Hay personas allá
afuera que saben más que tú, eso es un hecho.
¿Pero nada ganas
comparándote con los demás? Nadie es como tú, NADIE.
Si te comparas, terminarás
o sintiéndote mal, miserable, poca cosa o por el contrario sintiéndote superior
a los demás. Y eso mi amigo no ayuda.
Tenemos que dejar
se tratar de ser una copia barata del de al lado.
¿Te digo algo? Si
te comparas con los demás, creo que debes de ocuparte entonces de trabajar en
tu inseguridad de no ser suficiente. ¿No crees?
7.- Pensar solo en ver resultados
Todo en esta vida
es un proceso, por supuesto que son importantes los resultados, pero también es
importante vivir cada paso del camino sanamente.
La gran mentira es:
Entre más consigues, más feliz eres….
Presionarse todo el
tiempo para alcanzar más rápido sus objetivos y
olvidarse de su equilibrio emocional y de su salud… no es bueno. ¡Es
agotador!
Yo también me he auto
saboteado así… Trabajas trabajas y no despejas tu mente y no recargas pilas. Por
más que quieres avanzar, no avanzas ni una pizca. Y hasta te enfermas.
Además mientras
menos te obligas y menos te presionas, resulta que más feliz eres, aclaras tu
mente, piensas mejor las cosas y más productivo te vuelves.
Cuando dejas de
obsesionarte por ver resultados y dejas fluir las cosas, claro sin dormirte en
tus laureles, resulta que puedes ver más opciones, más soluciones.
8.- Huir de la locura y querer vivir con lógica
No seas tan
estricto contigo, no quieras solo cumplir todo lo que la lógica te dice, date
la oportunidad de hacer algo loco de vez en cuando que no tenga una explicación
lógica, a veces en las acciones llenas de locura, encuentras la más razonable
cordura. Yo siempre he dicho, ponte algunas reglas y luego rompe algunas.
Por otro lado, no
trates de entender todo, muchas veces las cosas sin explicación, son las que
encienden tu vida, las que te permiten experimentar y vivir más plenamente. Las
cosas suceden y ya, no quieras buscarle la explicación a todo, ¡solo vívelo!.
Baila como si nadie te viera… Canta como si nadie te oyera… Ama como si nunca te hubieran hecho daño… Vive como si el cielo estuviera en la tierra…
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